Miedo es una palabra que siempre me ha fascinado. Creo que el miedo es el motor del comportamiento humano y es lo que mas nos define como personas. Todo se basa en el miedo y en ser otra palabra que ocupa mis pensamientos, VALIENTE.
Crecer y madurar consiste en ir perdiendo miedos, en ir superando barreras de temor, enfrentarse a realidades que nos aterraban...y cada victoria es un paso adelante en nuestra realización personal.
Las religiones e ideologías basan sus fundamentos en los miedos humanos, en la necesidad de dar explicación a lo que no somos capaces de entender; El miedo mas universal es el miedo a lo que no conocemos, cuando comprendemos algo y lo aceptamos, ese temor desaparece, ganamos seguridad y confianza, y nos sentimos valientes. Durante mucho tiempo DIOS era la respuesta a ese miedo, la seguridad que necesitaba el hombre para explicar lo que hoy aún no somos capaces de entender. Pero la realidad es que somos seres asustadizos, llenos de miedo y temor, que basamos nuestras vidas en tratar de esconder nuestros miedos y buscar maneras de apuntalar nuestra existencia en un universo que se escapa a nuestra comprensión.
Durante nuestra vida nos enfrentamos a cientos de situaciones que nos obligan a ser valientes, a vencer nuestros miedos, y es una lástima que la mayoría de las veces lo hagamos porque no nos queda otra opción. En el fondo todos sabemos que creceríamos mas en todo si fuéramos mas valientes, si de verdad hiciéramos todo lo que se nos pasa por la mente, si nos tiráramos de cabeza a la piscina..., pero normalmente tenemos miedo, nos acojonamos...y esperamos a que el mundo siga girando y con suerte las cosas caigan a nuestro favor.
Pero cuando algunas veces te arriesgas, das el paso, y vences el miedo..., tu energía, tu ego, tu personalidad, tu espíritu...crece a niveles de chute de felicidad, ¿por qué no lo hacemos mas veces?...¿por miedo a perder el miedo a todo?.
Y entonces es cuando surgen otros miedos. Cuando crees que te conoces perfectamente, cuando has perdido el miedo a ser como eres y mostrarte como tal, cuando crees que no podrás pasar mas miedos internos...zas!!, te acojona una mirada, una sonrisa, una idea..., y tratas de volver a poner tu mundo en orden, pero ya es demasiado tarde, cuando la pasta de dientes sale del tubo, es imposible volver a meterla.
Tu corazón comienza a temblar, a tiritar de puro miedo, de repente ese calor y nudo en el estomago que se te queda con un gran susto...se convierte en una sensación permanente, no sabes si llorar o gritar, si sonreír o lamentarte...lo quieres dar todo, pero no quieres dar nada, te sientes capaz de hacer cualquier locura valiente, pero al mismo tiempo te sientes la cosa mas frágil del mundo.
El amor asusta, mucho, es lo que mas miedo nos produce. Sabemos que vamos a sufrir, sabemos que lo pasaremos mal, pero aún así seguimos adelante..., para amar hay que ser muy valiente... y yo tengo muchísimo miedo.
p.d: la entrada 250 de mi blog merecia una reflexión, y perder ciertos miedos fué la razón de la existencia de este blog...creo que hablar del miedo era un buen homenaje para seguir soñando...
y seguimos soñando!!
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